Se nos llama a permanecer en nuestros hogares como medida de prevención para contener el coronavirus, así como otras medidas muy necesarias ante la pandemia. Para las personas que viven en la calle, sin embargo, es imposible cumplir estas medidas. Hasta ahora estamos esperando “las medidas y protocolos” que hace algunas hora anunció el Ministro de Desarrollo Social y Familia, de momento es solo eso , anuncios y espera, no hay ninguna alternativa a las personas que viven en las calles de nuestro país.
Hoy nos comentaban personas que habitualmente comen en comedores de entidades privadas, esto se estan cerrando, siendo estos lugares su unica opción y que estos días se han quedado sin comer y apoyos que reciben. Restricciones de acceso a los centros de acogida donde las personas sin hogar se pueden resguardar durante el día. El cierre de bibliotecas, parques y otros espacios donde acostumbran a descansar las personas que viven en la calle. La presión de la policía, en algún caso, a personas que viven en la calle para que se marchen del lugar donde están sin que la persona pueda explicar su situación.
Son algunos de los casos que estos días hemos conocido en el Refugio, de hecho hemos recibido a un ciudadano norteamericano que se encontraba en calle y que no encontro lugar, otros nos buscan porque sufren enfermedades cronicas y no tienen como protegerse, entendemos que las medidas son necesarias por el bien común pero para las personas en situación calle se vuelve el camino cuesta arriba.
En este contexto de emergencia, el reto es precisamente cómo atender a todas las personas que viven en la calle. Porque la consigna es que todos y todas estemos confinados en casa, pero no todo el mundo tiene una casa y se nos dice: una persona solo puede estar en la calle si necesita comprar productos de primera necesidad o necesidades de suma urgencia, pero no contempla el hecho de estar en calle porque la persona viven en la calle.
La vulnerabilidad de las personas en situación calle está presente siempre, pero el riesgo de estos días es mucho más elevado, es condenarlos porque quedaron o viven a la vera del camino. Además de no poder cumplir con el confinamiento en casa, tampoco pueden cumplir las recomendaciones de higiene. Muchas de estas personas, además, presentan dolencias crónicas, tienen una incidencia más elevada de dolencias infecciosas y más riesgo de enfermar.
El Refugio a optado por seguir acompañando a las personas más vulnerables dentro de los vulnerables, en nuestra casa residen actualmente 8 personas: adultos mayores con enfermedades cronicas y sin redes de apoyo, migrantes que no cuentan con nadie más que les acoja, personas que han sufrido violencia intrafamiliar que no encontraron acogida en ningún lugar especializado. Nuestra opción no ha sido ni sera cerrar nuestras puertas, vemos el caso a caso , actuando con responsabilidad, haciendoles participes activos de “Me cuido para cuidar” implementando medidas de higiene y autocuidado donde cada uno y una tiene responsabilidades personales y comunitarias. Todo esto dentro de nuestras posibilidades y gracias a la generosidad de un grupo pequeño de amigos y socios pero muy comprometidos.
Esta situación de incertidumbre nos preocupa mucho y nos plantea una gran duda:
- ¿Se abrirán espacios adecuados para ofrecer un lugar seguro a todas las personas en situación calle?
La situación actual de emergencia requiere acciones a corto plazo y que protejan a los más vulnerables, como las personas en situación calle, pero también pone en evidencia el hecho que vivir en la calle es un riesgo siempre, es el rostro más crudo de la pobreza, la marginación y la necesidad de políticas y soluciones que miren a largo plazo y gestadas por todos quienes trabajamos con ellos y no solo como ejecutores de planes ya diseñados, esto requiere de las entidades del Estado y la sociedad civil, en una alianza virtuosa en bien de las personas en situación calle.
Quedamos a la espera de los anuncios del Ministro Sichel, las “medidas y protocolos” porque si Sr. Ministro como ud bien dijo “vivimos en comunidad” llamandonos a trabajar en solidaridad y responsabilidad, acá estamos nosotros y otras instituciones hermanas para trabajar por el bien de todos y todas , en particular por aquellos más vulnerables que son hijos de esta misma tierra que llamamos nuestra patria.
Refugio Buen Pastor “Porque una persona vale más”