Luego del atentado en Manchester, han surgido historias de personas que ayudaron a los miles de asistentes que estaban en el concierto de Ariana Grande.
Uno de estos héroes encubiertos fue Chris Parker de 33 años, un hombre que vive en la calle hace algunos años.
Algunos creen que las personas en situación calle son indiferentes ante los sucesos y hechos que ocurren en nuestra sociedad, este es el ejemplo que no es así. La gente de calle vive la solidaridad con sus pares y con quienes les rodean. Difunde hay que romper con los prejuicios.